Algo
de todo aquello que llevo por dentro me he atrevido a ponerlo por fuera sobre mi
piel, el resultado en buena parte me satisface, pero me doy cuenta que
necesitaré continuar en el empeño, son tantas pero tantas cosas que burbujean en
mi cerebro, siguen tratando de salir, lienzo existe, veré hasta donde llegaré,
en fin algo ya está ahí, esa profundidad
de mirada, esa forma de ser sin palabras, de querernos en silencio, de vivir internamente
sin límite, cuanto quería de lo suyo lejano que tuvo que abandonar, cuanto de
ello vino con ella para sernos inyectado en el día a día, nos decía que siempre
pertenecerías al sitio en donde recibiste tu primer aire, su tiempo descendió
en la clepsidra, pero lo nuestro está en piedra, alzó el vuelo, somos yo aquí,
ella allá junto al nuestro Pedro, el circulo algún momento cerrará.
Ro amaba sus finos pañuelos,
telas delgadas con pequeñas flores bordadas sobre ello, herencia de los suyos antepasados, los he encontrado guardados
con esmero entre muchas otras, muy pocas ocasiones los uso, recuerdo alguna vez
porto alguno para una función de ópera, nos enseñó a comprender su música, a
respetar sus formas, lo poco que tenía de su lejana tierra lo aprovecho, ese
simple tapete, que decir de sus delgados guantes de cuero negro, cuan pequeñas
fueron sus manos, las flores la emocionaban, que bello era su pelo, Pedro
nuestro siempre chiquillo, dentro de su aprendizaje de escultura necesito
realizar un rostro en cera, convenció a Ro su madre de estar inmóvil hasta que
se secase el yeso, luego vacío la cera… yo tengo, rescaté lo que ha quedado,
una luz por Ro, en estas mis noches me siguen acompañando….saben que he quedado
en esta….voy día por día….siento ese decir de la tonada aleluya… tantas cosas
burbujean en dentro…
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