LA JOVEN ME SORPRENDE

Esta orquídea me sorprende, cuando parece que esta terminando su ciclo vuelve a florecer. cada alumbramiento es un extasiarte, a pesar de estar en frente, de pronto se abre un botón de la planta, parece otra, de hecho así es.

   

LO QUE ME TRAE UN 26 DE FEBRERO

fue EN EL 1982, apareció nuestro Pedro Pablo, para nosotros como sus padres fue lo mejor de lo mejor..., hoy estoy en el 26 de febrero del 2022, el dejo estos lares, su madre Ro también dejo estos para acompañarlo, eso espero, mi sino es seguir, no hay selva negra ni abrazos ni regalos....

que me queda recuerdos, esperanzas truncadas y unas flores que retoñan en este día

 la inquietud fuimos, soy hasta cuando.....

MUSICA DE ANTAÑO DE SIEMPRE SIEMPRE EN EL DIARIO PAISAJE

Vamos, que simpático contradictorio suena el título, merece una explicación a lo corto, antaño no tanto, hice un camino hacia paisajes mas altos, lleno de sorpresas, la principal mi mismo comportar, vamos al tema, sucedió ESTAR EN UN Troncó MOVIL DURANTE LARGAS JORNADAS PARA LLEGAR A VER LO QUE VALIA VER, CANSANCIO ADORNADO CON MÚSICA TÍPICA DE ese ALTIPLANO, música QUE A FUERZA DE REPETIRSE, LLEGA A GUSTAR, lo curioso es que zumba en el interior esas tonadas, automático sientes transportarte a esas tierras, pero sin moverte de estas, por aquí tenemos colores, ambientes, sentimientos nostálgicos, cielos en cambio permanente...pero parece semejante, el antaño, el presente

LA LUNA DE LOS SIETE AÑOS 15 FEBRERO 2022

Es otro 15 de febrero, en estos pasados días el mal tiempo ha hecho de las suyas, la mayor parte del tiempo ha sido nublado, con neblina, como es mi costumbre revise mis candelabros, mis velas, alce la vista hacia el horizonte encontrándome que ese astro se había dado maneras de aparecer, aparecimiento de pocos minutos, pero suficiente como para acentuar lo esos días de hace siete años en los cuales en físico abandonaste estos lares, pero aquí en la actual me acompaña tu presencia junto con el fuerte brillar de esta luna, gracias...

 

SON SIETE AÑOS

 

Elaborar un algo que en verdad refleje aquello que englobe la faz, la  descripción, la personalidad de una persona, difícil, ahí está la cuestión, si la persona a la que se está retratando por medio de palabras es lejana nada cercana a aquella que la describe, la descripción en palabras sera probable muy a lo superficial, describirá talvez una faz redonda, talvez ovalada, más larga que corta, más ancha que una hoja de papel, aquel que la interprete igual la hará de acuerdo a su propia comprensión del adjetivo que lea, si se escribe que posee los ojos chinos el lector dudará con que nacionalidad los comparara, que son pepas gigantescas, con que pepas las compara, que tienen la profundidad del océano talvez si sea apropiado compararlas con un color obscuro, que tiene brillo, cuanto sería ese brillo, que la nariz es corta para el lector podrá ser grande, que los labios delgados, serán una linea de a cuanto, en fin podría todo ser casi superficial en esa descripción o en la percepción de quien lo lea. Bueno, debe igual preguntarse por el sentimiento, será posible esa representación literal del escribiente para trasmitir al lector, sentimientos, o solo el escribano recogerá de acuerdo con su propia experiencia lo que perciba de rasgos arrugas, líneas marcantes, promontorios…Es parte interesada el escribiente. Leía una frase que me gustó los fantasmas no lloran, pero el que escribe si llora, puede llorar, el hará a sus fantasmas llorar o reír en su propia imaginación, derramar a los fantasmas lagrimones, o reír a carcajadas. o será el mismo el que derrama lagrimotas, o risas, el que lee nunca vera ríos correr por supuestas inexistentes tersas mejillas, o sonrisas dulces, interesante, si la descripción es buena con mucho sentimiento y apelando a cosas comunes algo se imaginaría el lector. Una pintura sería mejor, pero el pintor plasmaría igual su propia visión, adornará la composición, que una fotografía, podría servir mejor para describir, pero tal vez la misma captaría el solo momento de la toma de esta, una luz ocasional. Como vemos, como nos vemos, como nos ven, como nos han visto. Me quedo con decir que me basta con la sensación que siempre será la reunión de los opuestos lo que hace el todo, que todos los momentos vividos me hacen el recuerdo. Mis fantasmas fueron carne, hueso, sentimientos, son parte integral de mi todo, las pequeñas grandes cosas, me acompañan, me acompañaran en mi interior consciente o no en mi paso a paso rumbo a encontrarme con ellos.

Las pequeñas verdes...

seguir rumbo, ergo el sitio en donde de a poco va feneciendo la orgullosa orquídea, parece que la altivez floral termina su ciclo, sigue la planta tenaz manteniendo una flor que ha perdido su color, se ha vuelto blanca transparente casi translucida, la flor se agarra con sus uñas al tallo, pronto terminará la pálida en el suelo, más de a poco sobresaliendo centímetros del nivel de la tierra, aparecen, brotan unas pequeñas hojas verdes, el encanto de las pequeñas cosas, entiendo persona alguna no debió sembrarlas serán pues consecuencia de la misma mezcla de tierra que fue utilizada en la siembra de la orquídea, ahí está la belleza de las pequeñas cosas, la belleza de la vida misma...la vida se abre paso, me recuerda ese canto a mi mismo... la pregunta ingenua que es este manojo de verde....la última sentencia, en algún sitio estoy esperándote...

 

Llegaré

Se me ocurrió hace algún tiempo no tan lejano, pero que ya me empieza a hacer distante, que debía aprovechar la oportunidad que se me presentaba de retornar a mis tierras rumanas de mi desarrollo en estudios formales e informales aún en mas cuando había de cumplir con una manda de los míos, me fui al norte como el trampolín para el retorno a mis lares orientales, era mi oportunidad, fui a buscar fríos y luces boreales, el resultado fue impactante, el frío es frío pero se satisface con ese observar, con ese sentir, con ese vivir esa belleza, que podemos interpretarla a como nos nazca, yo la interpreté como un ya "llegaré", mas temprano que tarde....igual fui a por mi dor, mi dolor, mi nostalgia, aquello que me marco, es ese igual decir "llegaré"