Dolor, sufrimiento, en poco tiempo, de hecho 2 días Rodica fue supuesta a mucho trajín, llegó caminando un día sábado a la clínica, en donde además del tratamiento de un dolor de estómago que le afectaba, le determinaron una infección en sus piernas en el sitio que tenía unas heridas en la piel que habían estado remitiendo. Decisión en un día domingo en la mañana por agravamiento por un problema vascular taponamiento de arterias, amputar su pierna por arriba de la rodilla, aceptada la decisión por parte nuestra de Ro y Fer, se solicito por parte de la especialista en infectología de la presencia de un psiquiatra para preparar a la paciente.
Rodica recibió la disposición de tomar sus alimentos pues la operación se posponía para decisión de toda una junta de médicos, tomo varias cucharadas de sopa, me solicitó pasear empujando su árbol de sueros por la habitación, de a poco cubrimos el recorrido, miro hacia afuera por la ventana, retorno a sostenerse en el espaldar de un sofa cama de la misma manera como le gustaba hacerlo en nuestra casa, luego sintió necesidad de ir al baño, llegamos, se sentó en el sitio hizo el líquido que debía hacer, intento levantarse, ahí apareció un problema, sus fuerzas habían mermado, con la ayuda de la asitente regreso a su sitio, su sillón en donde descansaba, me pidió que estuviera junto a ella, nos tomamos de las manos, ella daba la sensación de que dormía. Pero sufría ciertas contracciones y ante mis preguntas me contestaba en un comienzo bien, luego mas entrecortado, en un final había fijado sus ojos en un fijo infinito. Mi impresión es que sufrió un problema cerebral.
Acudí por socorro, aparecierón los galenos de cuidados intensivos más junta de médicos telefónica, dos soluciones la primera trasladarla a intensivos para colocación de respirador, diálisis, otras, pero sin garantías de que Rodica seguiría si se producía el milagro de su recuperación siendo Rodica.
Segunda opción peor que la primera amputar la pierna en el estado en que se encontraba Rodica, ninguna posibilidad real de que sobreviviera a la operación aún en el caso de salir de la intervención, cuidados intensivos, sin asegurar que Rodica fuese luego Rodica.
Soluciones imposibles en la práctica, mi decisión que me ha hecho pedazos, cruzar de sufrimiento a mi esposa, suspender todo, permitiendo que fenezca sin dolor.
Sucedió, poco a poco fue apagandose, terminó en poco tiempo, por abandonarnos
Hecha la cremación del caso, que es lo que ella había solicitado el día de hoy a retornado en forma de cenizas a reposar junto a las de nuestro Pedro Pablo. Ese es el motivo de la fotografía.
José nuestro amigo, mas que un amigo nos ha acompañado en este doloroso calvario. Estábamos con José arreglando el oratorio con los cofres, cuando ha sonado el timbre de la casa, ha llegado un arreglo floral solicitado de lejanas tierras de aquellos que supieron apreciar a Rodica. Gracias a ustedes, Theresa, Max, Michel e Ioana.
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